Las pantallas digitales LED han generado una revolución en el mundo de la publicidad ya que cuentan con una infinidad de ventajas con respecto a los formatos tradicionales, especialmente a la hora de ejercer un mayor impacto visual sobre el público.
La señalización digital ha permitido que los anunciantes puedan mostrar sus mensajes de una forma más llamativa y espectacular. En Corea del Sur, por ejemplo, en el distrito Gangnam-gu de Seúl, las empresas pueden difundir sus anuncios con alucinantes efectos ópticos en una gigantesca pantalla LED de 81 metros de ancho y 20 metros de altura, que envuelve a todo un edificio.
A su vez, los comercios o empresas pueden dirigir sus anuncios a una audiencia específica, con contenidos de interés para ese público difundidos exactamente en el lugar donde se encuentra. Por ejemplo, una pantalla en un estadio de fútbol, básquet o hockey es perfecta para exponer anuncios sobre ropa deportiva, suplementos alimenticios u otros productos requeridos por las personas que asisten a esos eventos deportivos.
Las pantallas digitales se ubican en cualquier sitio: centros comerciales, avenidas, rutas, edificios emblemáticos o estadios deportivos. Aunque, la mayoría se sitúa en los espacios públicos más concurridos de las ciudades. Las calles de las grandes urbes están habitadas por espectaculares pantallas digitales. Uno de los ejemplos más conocidos (se puede ver en muchas películas de Hollywood) es la plaza de Times Square, en pleno corazón de Nueva York, en donde hay una gran cantidad de carteles digitales encendidos las 24 horas del día que llaman la atención de los millones de personas que transitan diariamente por ese lugar.
La posibilidad de ubicar las pantallas en diferentes lugares permite anunciar prácticamente cualquier tipo de producto o servicio. La clave para que los anuncios publicitados tengan éxito, está en colocarlos en una buena ubicación, y que sean reproducidos en el momento exacto cuando la audiencia interesada pueda visualizarlo. El lugar ideal dependerá del producto o servicio a anunciar.
En síntesis, las pantallas digitales ofrecen a las empresas una enorme capacidad para potenciar la marca. La calidad de las imágenes, el movimiento o los llamativos colores aportan mayor realismo y atractivo visual a los miles de mensajes comerciales diarios ofrecidos por las empresas, generando que las personas presten una gran atención a los anuncios.